viernes, 30 de marzo de 2007

"Apunte de paisaje" de José Hierro



Las nubes puestas a secar al sol.
Los ciruelos condecorados por la primavera.
Abril, de manos húmedas,
acaricia la frente de los arces.
La lengua púrpura del atardecer
lame la curva de las lomas de plomo
y las convierte en carne tibia.

Todo ha sido creado
para mayor gloria del viento del oeste
que despeina las aguas del lago.
(Más allá, la ciudad, desplegadas las velas de cemento
navega hacia su olvido, noche, sueño, nunca.)

4 comentarios:

Churra dijo...

Abril en New York,,,me encantaria.
Precioso poema , nostalgia de la ciudad .
Beso.

(no conozco NY)

Humbert dijo...

añorar lo que no se ha tenido me parece el deseo más fuerte que se puede expresar.

yo tengo nostalgia e inquietud a la vez. menos de 20 días...

besos.

Anónimo dijo...

hoy leía mis viejas eSperanzas y me topé con un comentario tuyo, busqué tu sitio y seguía donde lo había dejado, sé que es tuyo y tu eres el que lo dejas o lo haces, pero cuando uno lee a alguien como ya lo habiamos hablado en letras, es de una, pues.

Entonces leí lo poco que no había leído desde mi último comentario, es que una lee y no comenta, malamente lo sé.

Leí la foto de Hierro y entonces busqué entre mis favoritos y tomé un puñado de letras que te dejo acá para uando gustéis regresar.

José Hierro:


INTERIOR

Tu piel me devolvía
algo remoto. (¿Es esto
un poema de amor?
¿Es un canto de duelo
o de esperanza? Un himno
triunfal o una nostalgia
acariciada sobre
la realidad?)
No había
nadie, sino nosotros.
(Los demás no existían.)
Una botella, un libro,
un cenicero. Ahora
la vida es de cristal,
de metal, de papel.
Ahora es la botella
más bella que una flor.
El cenicero tiene
el sonámbulo brillo
de las olas. El libro
es una roca... (¿Es esto
un poema de amor?)
En una habitación
en penumbra, entre el humo
que nos aleja... (¿Es esto
un Poema de amor?)
...sin hablar...(nada está
dicho aún...).
Olvidaba
otra cosa: la música
frutal, el corazón
errante de los siglos,
suena para nosotros.

Toqué tu frente como
si me fuera a morir
un instante después.
Igual que si me anclases
a la verdad. (¿Es esto
un poema de amor?
¿Fuimos sus criatura
melancólicas...?)

Libro,
botella, cenicero.
(No flor, ni ola, ni rocas.)
He llamado a las cosas
por su nombre, aunque el nombre
rompa el hechizo. Quiero
todo aquello que ha sido
el instante, su carne
y su alma (no sólo
su alma), lo que el tiempo
roe (no lo que el tiempo
purifica).

Al contacto
de tu frente, los días
volaban desprendidos
de la copa. Pensé
que los días... ¿Amor
es eso que devuelve
el tiempo huido? ¿Eras
entonces el amor?
¿Me estoy cantando a mí,
recobrado y perdido?
¿Al amor, al que duerme
bajo tu piel, la pobre
criatura del cielo
destinada a morir
sin haber conocido
sus imposibles padres.

De "Cuanto sé de mí" 1957-1959

labios pues y hasta pronto.

Speranza secreta.

Humbert dijo...

speranza: gracias por el poema. no dudes que lo utilizaré. un placer.